Río Indio, gasoducto y Corozal: los tres pilares de la nueva agenda del Canal

El Canal de Panamá lanzó una estrategia de transformación para los próximos diez años que busca blindar su operación frente al estrés hídrico, diversificar fuentes de ingresos y consolidar a Panamá como plataforma logística regional. El plan, presentado ante medios de comunicación por el ministro para Asuntos del Canal, José Ramón Icaza; el administrador Ricaurte Vásquez Morales; y la subadministradora y oficial de Sostenibilidad, Ilya Espino de Marotta, contempla más de B/. 8,000 millones en inversiones y un énfasis en sostenibilidad, empleo y transparencia.

Dos ejes: agua y crecimiento sin aumentar el consumo hídrico

La hoja de ruta descansa en dos pilares. El primero, seguridad hídrica, con acciones para incrementar la capacidad de almacenamiento de agua destinada al consumo humano y a la operación de las esclusas, con el fin de garantizar la sostenibilidad de la vía a largo plazo.
El segundo, crecimiento sostenido, apunta a diversificar negocios y elevar la capacidad de transporte sin incrementar el uso de agua, capturando mayor valor de la ruta y manteniendo al Canal como opción preferida por la industria marítima.

De ruta interoceánica a centro logístico

La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) anticipa una evolución del rol tradicional de la vía: pasar de ser un corredor marítimo a un verdadero hub logístico, integrado con infraestructura terrestre y portuaria que potencie la ventaja competitiva del país en el comercio mundial.

Proyectos estratégicos: inversión, empleo e ingresos para el Estado

El paquete de proyectos incluye:

• Lago de Río Indio: garantizará agua para más de un millón de personas y mayor confiabilidad en los tránsitos, permitiendo maximizar el valor de la ruta. El proyecto avanza con diálogo comunitario y compromisos en infraestructura, salud, educación y empleo, además de programas de capacitación y compras a proveedores locales.
• Corredor energético interoceánico: prevé un gasoducto de 76 km y dos terminales marítimas para movilizar hasta 2.5 millones de barriles diarios de productos energéticos entre costas Atlántica y Pacífica sin cruzar las esclusas. Solo el gasoducto se estima que genere más de 45 mil empleos en construcción y 11 mil en operación, con un aporte proyectado superior a B/. 64 mil millones a lo largo de su vida útil. Para el Estado, se calcula un ingreso mayor a B/. 647 millones durante la ejecución y más de B/. 35 mil millones entre 2031 y 2050, recursos destinados a programas sociales.
• Puerto de Corozal (ribera este): se integrará a una plataforma logística terrestre conectada por carretera y ferrocarril, reforzando la cadena multimodal que soporta el tránsito de mercancías.

Según la ACP, el crecimiento de los ingresos derivado de estos proyectos permitirá aumentar las transferencias anuales al Gobierno Nacional, con impacto directo en inversión social.

Transparencia y participación internacional

La entidad subrayó un proceso abierto y competitivo para el desarrollo de las iniciativas. En el caso del gasoducto, la Junta Directiva ya aprobó el inicio del proceso para seleccionar al concesionario. La ruta contempla: acercamiento a potenciales interesados, precalificación, mesas técnicas y publicación del pliego definitivo. La licitación está proyectada para el segundo trimestre de 2026, con expectativa de participación de empresas internacionales con experiencia en este tipo de infraestructura.

En paralelo, el estudio de prefactibilidad del Puerto de Corozal se encuentra en fase de contratación, con resultados esperados para el primer trimestre de 2026 y arranque de obras en 2028.

Compromiso social y sostenibilidad

La ACP afirmó que cada proyecto se diseña con enfoque humano y desarrollo inclusivo, promoviendo empleo local, capacitación y encadenamientos productivos. Con esta agenda, el Canal busca seguir siendo motor del comercio global y del crecimiento nacional, al tiempo que impulsa un progreso más justo, resiliente y sostenible para la población panameña.