Biden facilita la residencia para «Dreamers» casados con estadounidenses

Biden facilita la residencia para «Dreamers» casados con estadounidenses

El presidente Joe Biden ha anunciado una medida que simplifica el proceso de obtención de la residencia permanente para los «dreamers» casados con ciudadanos estadounidenses. Este anuncio se realizó durante la conmemoración del duodécimo aniversario del programa DACA, que permite a los migrantes que llegaron a Estados Unidos siendo niños vivir y trabajar legalmente en el país.

Esta nueva política busca regularizar a cientos de miles de migrantes a pocos meses de las elecciones presidenciales de noviembre, una medida que ha sido criticada por el ex presidente Donald Trump. Biden aseguró que la medida permitirá a los migrantes casados con estadounidenses y a sus hijos obtener la tarjeta verde sin necesidad de salir del país.

Las nuevas regulaciones beneficiarán a aquellos que hayan vivido en el país por al menos 10 años. Además, quienes obtengan la residencia podrán optar por permisos de trabajo y eventualmente solicitar la ciudadanía. Según cálculos del gobierno, aproximadamente 500,000 migrantes y 50,000 hijastros de estadounidenses podrían acogerse a esta normativa.

En un esfuerzo por apoyar a los graduados en centros educativos de Estados Unidos, Biden también acelerará la concesión de visas de trabajo para aquellos que reciban ofertas de empleo altamente cualificadas.

El presidente Biden criticó a los republicanos por su negativa a debatir un paquete migratorio bipartidista y defendió sus acciones como necesarias para garantizar la seguridad de las fronteras del país. La Casa Blanca reportó una disminución del 25% en los cruces irregulares desde la implementación de las nuevas medidas.

Mientras Trump condenó estas medidas, calificándolas como un ataque a la democracia estadounidense, otras voces, como la del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador y varias asociaciones de defensa de migrantes, celebraron la iniciativa como un avance positivo.

Deirdre Schifeling, directora política de ACLU, y Rebecca Shi, directora de la American Business Immigration Coalition, destacaron que esta política no solo es moralmente correcta, sino también económicamente beneficiosa y popular entre los votantes.