Capturan a prófugo clave en caso Jericó y se confirma la detención Abraham Rico Pineda

Fiscalía consolida su caso en operación Jericó con 35 detenidos y más de 1,600 interceptaciones

El miércoles 7 de mayo marcó un nuevo giro en la compleja operación Jericó, cuando dos figuras clave vinculadas a una red criminal transnacional enfrentaron importantes decisiones judiciales. Por un lado, el Tribunal Superior de Apelaciones confirmó la detención preventiva de Abraham Rico Pineda, acusado de blanqueo de capitales; por otro, la juez de garantías Irene Cedeño ordenó la detención provisional del ciudadano colombiano Juan Pablo Morales Gaviria, presunto coordinador logístico de la red, quien había permanecido prófugo por más de un año.

La audiencia sobre Abraham Rico Pineda —hijo del diputado perredista Raúl Pineda— se centró en el riesgo de fuga y la gravedad del delito que se le imputa. El tribunal concluyó que existen suficientes elementos para mantener la medida cautelar. La fiscalía sostiene que Rico Pineda jugó un rol relevante en el manejo de fondos ilícitos provenientes del narcotráfico, lo que ha salpicado también a su padre, sobre quien pesa una solicitud formal ante la Corte Suprema de Justicia para iniciar una investigación por presunto blanqueo de capitales. El magistrado Olmedo Arrocha tiene en sus manos la decisión sobre la admisión del proceso.

En paralelo, la captura de Juan Pablo Morales Gaviria, ocurrida en la madrugada del martes 6 de mayo en el corregimiento de Betania, fue presentada por la fiscalía como un golpe contundente contra el ala logística de la red. Morales Gaviria se desplazaba en un vehículo con vidrios polarizados pese a tener activa una orden de captura desde 2023. Las autoridades lo acusan de coordinar la introducción de más de 600 kilos de cocaína en Panamá y de mantener nexos estrechos con jefes de la organización, tanto dentro como fuera del país.

Según la investigación, la droga era transportada desde el Darién con apoyo de elementos del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), para luego ser almacenada en un taller ubicado en Juan Díaz, propiedad de Edgar Ocigian, ya condenado por delitos de pandillerismo. Las pruebas recopiladas por el Ministerio Público, incluyendo 1,666 interceptaciones telefónicas y 153 diligencias de vigilancia, revelan que Morales Gaviria mantenía reuniones de alto nivel con otros cabecillas como Jorge Néstor Sánchez, capturado en Colombia, en el apartamento 38B del PH Green Garden, en Santa María.

Los fiscales también presentaron comunicaciones interceptadas entre Morales Gaviria y Francisco Serrano, otro presunto cabecilla de la red, en las que se discutía la utilización de vehículos con compartimentos ocultos y la colaboración de funcionarios públicos para facilitar el tránsito de los cargamentos. Estas evidencias fueron consideradas suficientes por la juez Cedeño para imputarle cargos por conspiración para la introducción de drogas y ordenar su detención preventiva.

La operación Jericó, lanzada el 30 de junio de 2023, ha sido descrita por el Ministerio Público como una de las investigaciones más sofisticadas en la lucha contra el crimen organizado en Panamá. Hasta la fecha, ha dado lugar a la detención de 35 personas y ha expuesto una red con vínculos en sectores políticos, empresariales y de seguridad del país.

El Ministerio Público continúa desarrollando nuevas líneas de investigación, particularmente en torno a las posibles redes de protección institucional que habrían facilitado las actividades delictivas de Morales Gaviria y otros miembros de la organización. De acuerdo con las autoridades, Morales huyó a Colombia cinco días después de los primeros allanamientos masivos en 2023, pero su reciente reingreso al país permitió su captura. Su detención se convierte así en otro hito en una operación que, más allá de la incautación de drogas y el congelamiento de activos, ha puesto en evidencia el alcance y la penetración de las redes criminales en estructuras del Estado panameño.