
REDACCIÓN | Panamá en Directo
Panamá | octubre 8, 2024El recién electo alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, fue asesinado de manera violenta apenas unos días después de asumir su cargo. El cuerpo del alcalde fue hallado decapitado en un hecho que ha conmocionado a la sociedad de Guerrero. Según fuentes locales, su cabeza fue dejada sobre una camioneta, un gesto macabro que ha generado temor en la comunidad y que evidencia el poder de los grupos criminales en la región.
Arcos, quien asumió la alcaldía representando a una coalición opositora (PRI, PAN y PRD), había visitado zonas afectadas por las recientes lluvias tan solo unas horas antes de su muerte. El ataque es parte de una serie de asesinatos recientes que han afectado a funcionarios locales en la zona, incluyendo el secretario del Ayuntamiento y un militar que estaba siendo considerado para ocupar el puesto de jefe de policía.
El estado de Guerrero ha sido escenario de conflictos violentos entre grupos del crimen organizado que luchan por el control de rutas estratégicas, como el transporte público. Las autoridades aún investigan las posibles causas detrás del asesinato de Arcos, pero no descartan la intervención de mafias locales como el grupo criminal conocido como Los Ardillos, cuyo líder ha sido vinculado a la política local en el pasado.
La muerte del alcalde Arcos también llega en un momento tenso para el país, ya que la violencia en otras regiones como Sinaloa y Chiapas ha empeorado en los últimos días. La reciente masacre de migrantes en Chiapas y los enfrentamientos en Culiacán reflejan una crisis de seguridad que sigue sin controlarse.
Guerrero, al igual que otras regiones del país, sigue siendo víctima de esta ola de violencia que pone en jaque a las autoridades locales y nacionales. Los habitantes de Chilpancingo y otras comunidades de la región expresan su temor y frustración ante una situación que parece no tener fin.