
REDACCIÓN | Panamá en Directo
Panamá | enero 13, 2025La Conferencia Episcopal Italiana (CEI) ha emitido nuevas normas que permiten a los jóvenes homosexuales aspirar al sacerdocio, siempre y cuando no apoyen lo que denominan “la llamada cultura gay”. Estas reglas, aprobadas por el Vaticano y publicadas el 9 de enero de 2025, buscan clarificar la postura de la Iglesia respecto a la homosexualidad en los seminarios, aunque han generado un intenso debate tanto dentro como fuera de la institución.
El documento de 68 páginas especifica que quienes presenten “tendencias homosexuales profundamente arraigadas” o practiquen la homosexualidad no podrán ser admitidos en los seminarios ni ordenados como sacerdotes. Asimismo, enfatiza que aquellos que decidan seguir esta vocación deben mantener un perfil discreto respecto a su orientación sexual, reforzando el requisito del celibato.
En un comunicado oficial, la CEI subrayó que estas normativas buscan respetar a las personas homosexuales, pero reiteraron que no se admitirán conductas que contradigan las enseñanzas tradicionales de la Iglesia. Sin embargo, críticos y defensores de los derechos LGTB+ señalan que estas medidas obligan a los candidatos homosexuales a ocultar su identidad, comparándolas con la política militar estadounidense de “No preguntes, no digas”.
Polémica en torno a los comentarios del Papa Francisco
El debate se intensificó tras una serie de declaraciones controvertidas del papa Francisco en 2024. En dos ocasiones, el pontífice utilizó términos despectivos al referirse a la homosexualidad, generando indignación entre asociaciones defensoras de derechos humanos.
En un encuentro con sacerdotes en Roma, el Papa describió el ambiente del Vaticano como impregnado de “frociaggine”, una palabra en dialecto romano que deriva de un insulto homófobo y que puede interpretarse como una crítica hacia la presencia de personas homosexuales en la Iglesia.
Además, Francisco recomendó que los homosexuales que aspiren al sacerdocio busquen la orientación de un psicólogo antes de considerar el seminario. Aunque el Vaticano aclaró posteriormente que el Papa no tuvo intención de ofender, estas declaraciones alimentaron la percepción de una postura ambivalente hacia el colectivo LGTB+.
Reacciones mixtas
Mientras que algunos sectores dentro de la Iglesia consideran que estas nuevas normas representan un avance al permitir la entrada de homosexuales al sacerdocio, siempre que cumplan con las restricciones impuestas, otros las ven como discriminatorias y desfasadas.
Grupos LGTB+ y defensores de los derechos humanos han condenado tanto las declaraciones del Papa como las condiciones estipuladas por la CEI, señalando que perpetúan estigmas y discriminación hacia las personas homosexuales. Por otro lado, sectores conservadores celebran las normas como un esfuerzo por preservar los valores tradicionales de la Iglesia.
El debate sobre la homosexualidad en la Iglesia Católica sigue siendo un tema divisivo que pone en evidencia las tensiones entre la tradición y los derechos humanos en un mundo en constante transformación.