
REDACCIÓN | Panamá en Directo
Panamá | febrero 4, 2025Audio generado por AI para Panamá en Directo
Panamá en Directo | La intervención de Elon Musk en agencias federales
En los últimos días, Elon Musk, el hombre más rico del mundo, ha causado un gran revuelo en varias agencias del gobierno de Estados Unidos. Sus acciones han desatado caos y desconcierto, y han puesto en duda la capacidad de un empresario no elegido por el pueblo para tener tanta influencia sobre el funcionamiento del gobierno.
Durante estas semanas, Musk y sus aliados han logrado acceder al sistema de pagos del Departamento del Tesoro, amenazaron con cerrar la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y ofrecieron a los empleados federales un plan de «compensación». En varias agencias, funcionarios de carrera han sido desplazados, e incluso algunos han sido bloqueados de sus oficinas y computadoras.
Lo que parece ser una maniobra para concentrar el poder en el Ejecutivo ha levantado muchas preguntas sobre el respeto por las leyes y los procedimientos establecidos por el Congreso. Además, Musk tiene acceso a contratos gubernamentales multimillonarios, lo que ha incrementado la preocupación sobre posibles conflictos de intereses.
Uno de los movimientos más sorprendentes fue el intento de Musk de hacer cambios radicales en la Oficina de Gestión de Personal (OPM), la agencia encargada de la gestión de recursos humanos del gobierno federal. A través de esta oficina, se enviaron correos electrónicos a los empleados federales sugiriendo que renunciaran, ofreciéndoles pagos hasta septiembre.
Por otro lado, en la USAID, Musk ha criticado duramente la agencia y sus actividades, incluso buscando reducir su presupuesto o eliminarla por completo. Sin embargo, expertos legales señalan que el presidente no tiene autoridad para eliminar esta agencia sin la aprobación del Congreso.
Al mismo tiempo, Musk y sus colaboradores han presionado para implementar una serie de reformas en la Administración General de Servicios (GSA), que supervisa bienes raíces y adquisiciones federales, pidiendo reducciones de personal y recortes drásticos en el presupuesto. Las medidas propuestas en la GSA también podrían afectar la gestión de los contratos gubernamentales más importantes.
Además, el Departamento del Tesoro ha estado involucrado en un escándalo relacionado con los pagos federales, donde se alegó que algunos funcionarios intentaban aprobar pagos fraudulentos o a grupos terroristas. Musk ha comentado sobre estos problemas en sus redes sociales, lo que ha desatado una serie de demandas judiciales por parte de sindicatos gubernamentales y grupos de control.
Este enredo legal ha puesto a prueba los límites de la autoridad presidencial y ha dejado claro que la intervención de Musk en el gobierno federal está siendo vigilada de cerca, tanto por las autoridades como por la opinión pública. Los próximos días serán cruciales para determinar las consecuencias legales de estas acciones.