REDACCIÓN | Panamá en Directo
Panamá | abril 30, 2024Universidad de Columbia suspende a manifestantes propalestinos en campus
La Universidad de Columbia, situada en Nueva York y epicentro de las protestas propalestinas en Estados Unidos, ha iniciado el proceso de suspensión de estudiantes que se niegan a levantar un campamento instalado en el campus. Este lunes, las autoridades universitarias emitieron un ultimátum a los manifestantes, exigiendo que desmantelaran las carpas antes de las 14:00 horas o enfrentarían la suspensión y la imposibilidad de completar el semestre académico.
Tras el vencimiento del plazo, la universidad confirmó que ha comenzado a suspender a estudiantes que no han acatado la orden de desalojo. Aquellos que aceptaron marcharse y firmaron un compromiso de cumplir las políticas de la institución se les permitirá completar el semestre, según declaraciones del vicepresidente de comunicaciones de la universidad, Ben Chang.
Los manifestantes propalestinos se han negado a abandonar el campamento, calificando las medidas de la universidad como «tácticas repulsivas de miedo». La líder estudiantil Sueda Polat afirmó que no se moverán hasta que la universidad satisfaga sus demandas o los muevan por la fuerza.
La Universidad de Columbia ofreció a los manifestantes la posibilidad de evitar la suspensión si accedían a abandonar el lugar y firmar un documento comprometiéndose a cumplir las normas de la institución. Sin embargo, aquellos que se nieguen a firmar el documento enfrentarán represalias, incluida la suspensión y la pérdida de acceso a la vivienda, al campus y a la atención médica.
La rectora de la universidad, Minouche Shafik, instó a los manifestantes propalestinos a poner fin «voluntariamente» a las protestas, asegurando que se están explorando opciones internas alternativas para resolver la crisis. Afirmó que la universidad no desinvertirá en Israel, pero se comprometió a revisar nuevas propuestas de los estudiantes y a realizar inversiones en sanidad y educación en Gaza.
Los organizadores de las protestas niegan las acusaciones de antisemitismo y defienden que sus acciones están dirigidas al gobierno de Israel y su manejo del conflicto en Gaza. También afirman que los episodios más amenazantes fueron organizados por activistas que no son estudiantes.









