Fiscal General confirma conexión entre incendio y ataque terrorista en Bourbon Street

Un incendio en una casa ubicada en el vecindario de St. Roch, al este de Nueva Orleans, ha sido vinculado a un ataque terrorista ocurrido en las cercanías, según confirmó la Fiscal General de Luisiana. El incidente se produjo la mañana del miércoles 1 de enero de 2024, en un contexto de terror tras un ataque que dejó al menos 15 muertos y 35 heridos en el Barrio Francés de la ciudad.

El ataque, protagonizado por Shamsud-Din Jabbar, de 42 años y originario de Texas, ocurrió alrededor de la medianoche, cuando el hombre condujo una camioneta de manera imprudente, eludiendo un puesto de control policial y embistiendo a un grupo de peatones que celebraban la llegada del Año Nuevo en la icónica Bourbon Street. Jabbar arrolló a decenas de personas antes de ser abatido en un tiroteo con la policía, que resultó en la lesión de dos oficiales.

Las autoridades han clasificado el ataque como un acto terrorista y, según la Fiscalía, existen indicios de que Jabbar no actuó solo. Se encontró una bandera del grupo yihadista Estado Islámico (ISIS) en el remolque del vehículo utilizado durante el atentado. Investigaciones adicionales han revelado que Jabbar era veterano del Ejército de los Estados Unidos y que contaba con estudios en sistemas de información y una licencia de bienes raíces.

A tan solo dos horas después del ataque, se reportó un incendio en una vivienda de la calle Mandeville, a aproximadamente 3 kilómetros del lugar del atentado. Equipos de bomberos, policía y expertos en explosivos acudieron al lugar para controlar un «pequeño fuego», mientras se cerraba el área y los investigadores trabajaban en el sitio.

La Fiscal General Liz Murrill aseguró a la cadena WDSU-TV que el incendio está relacionado directamente con el ataque terrorista, afirmando que las pruebas obtenidas, como grabaciones de cámaras de seguridad, indican que los responsables intentaron cubrir sus huellas tras el atentado. Según Murrill, las imágenes muestran la colocación de un artefacto explosivo entre un vehículo de la policía estatal de Luisiana y un coche de la agencia de Vida Silvestre y Pesca del estado, ambos presentes en la ciudad como parte de un refuerzo en los patrullajes locales.

El FBI ha abierto una investigación para esclarecer todos los detalles del ataque y el posible involucramiento de otras personas en la organización de este acto de terror.