REDACCIÓN | Panamá en Directo
Panamá | octubre 24, 2024El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos ha comenzado una investigación exhaustiva que abarca a más de 600 inmigrantes, con el objetivo de desmantelar la presencia del Tren de Aragua, una organización criminal de origen venezolano que ha extendido su influencia en varios estados del país. Según reportes de medios locales, entre los investigados se encuentran personas que podrían estar directamente ligadas a las actividades ilícitas de la banda, mientras que otros serían testigos o víctimas de las operaciones delictivas.
La investigación surgió en el marco de una creciente preocupación por los cruces ilegales en la frontera sur de EE.UU., tema central en las campañas presidenciales en curso. Las autoridades federales han puesto especial atención en aquellos inmigrantes que ingresan al país con posibles conexiones a esta banda, catalogada como una organización criminal transnacional.
Hasta la fecha, se estima que unas 100 personas, de las identificadas por el DHS, están directamente asociadas al Tren de Aragua y son consideradas «sujetos de interés». El Departamento ha solicitado apoyo del FBI para reforzar la vigilancia y las acciones en varios estados, donde la banda ya tiene una presencia confirmada.
El foco en esta investigación aumentó en agosto, tras la divulgación de un video en el que se ve a hombres armados invadiendo viviendas en Colorado. Este incidente encendió las alarmas a nivel nacional y provocó que las autoridades reforzaran su compromiso de combatir a la pandilla, que se cree opera en al menos 15 estados, con posible actividad en otros ocho.
Desde octubre de 2022, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha detenido a más de 100 personas vinculadas con el Tren de Aragua, y solo en este año, las cifras alcanzan los 23 arrestos. La organización, conocida por su participación en delitos como la extorsión, el tráfico de drogas y el contrabando de migrantes, fue incluida en julio en la lista de bandas delictivas internacionales más peligrosas, junto a grupos como la Mara Salvatrucha (MS-13).
El gobierno de EE.UU. ha ofrecido una recompensa de 12 millones de dólares por información que lleve a la captura de los líderes del Tren de Aragua, entre ellos su principal cabecilla, Héctor Rusthenford Guerrero, alias «Niño Guerrero», quien se cree se esconde en Colombia.
La expansión de esta organización ha seguido el camino de la diáspora venezolana, en la que millones de personas han salido del país en busca de mejores oportunidades debido a la crisis económica y política que atraviesa Venezuela. Sin embargo, la falta de cooperación entre los gobiernos de Venezuela y Estados Unidos ha dificultado las investigaciones, lo que lleva a expertos a considerar que las 600 personas actualmente investigadas podrían ser solo una pequeña fracción del verdadero alcance de la banda en territorio estadounidense.