REDACCIÓN | Panamá en Directo
Panamá | agosto 1, 2024OEA no logra, por un voto, consenso sobre resolución para transparencia en elecciones venezolanas
El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) celebró una sesión extraordinaria para debatir una resolución que pedía transparencia en las elecciones presidenciales de Venezuela, celebradas el 28 de julio. La propuesta de resolución buscaba que el Consejo Nacional Electoral (CNE) publicara de inmediato los resultados detallados por cada centro de votación y que se permitiera una verificación exhaustiva de los resultados en presencia de observadores internacionales. Sin embargo, la resolución no fue aprobada debido a la falta de consenso entre los Estados miembros.
Desarrollo de la sesión y resultados de la votación:
La sesión comenzó con un retraso de más de dos horas, según el presidente del Consejo Permanente, Ronald Sanders, debido a desacuerdos sobre una frase específica del borrador de la resolución. Finalmente, de los 34 países miembros de la OEA, 17 votaron a favor de la resolución, 11 se abstuvieron y ninguno votó en contra, mientras que cinco países no participaron en la votación. Para que la resolución fuera aprobada, se requería una mayoría absoluta de 18 votos.
Entre los países que se abstuvieron se encuentran Colombia y Brasil, dos naciones que habían previamente pedido al gobierno de Nicolás Maduro la publicación de las actas electorales. La abstención de estos y otros países fue decisiva para el fracaso de la resolución, dejando a la OEA sin una postura clara y unificada sobre el tema.
Reacciones internacionales y declaraciones:
A nivel internacional, la falta de transparencia en los comicios venezolanos ha sido un tema de gran preocupación. Estados Unidos, a través de su portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, expresó que «nuestra paciencia y la de la comunidad internacional se está agotando» en espera de que las autoridades venezolanas publiquen los datos completos de las elecciones. Asimismo, Brian Nichols, del Departamento de Estado de EE. UU., respaldó la declaración del Centro Carter que cuestionaba la integridad del proceso electoral.
Por su parte, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, rompió su silencio de dos días y utilizó la plataforma X para instar al gobierno venezolano a permitir un escrutinio transparente y una observación internacional. Petro subrayó la importancia de que todas las fuerzas políticas del país puedan participar y observar el proceso para garantizar su legitimidad.
Situación en Venezuela:
En Venezuela, el presidente Nicolás Maduro se dirigió a los medios de comunicación el mismo día, afirmando que estaba «listo para presentar el 100 por ciento de las actas» y acusando a los líderes opositores, Edmundo González Urrutia y María Corina Machado, de ser responsables de la violencia durante las protestas post-electorales. Maduro afirmó que estos líderes «tienen las manos manchadas de sangre» y los describió como «criminales». Además, vinculó las manifestaciones con un supuesto golpe de Estado orquestado por sectores de la derecha y mencionó al líder de la banda criminal «Tren de Aragua», Héctor Guerrero Flores, alias ‘Niño Guerrero’, como uno de los instigadores de la violencia.
Las protestas en Venezuela, que comenzaron el lunes 29 de julio tras el anuncio de la victoria de Maduro, han dejado al menos 11 muertos, según organizaciones de derechos humanos, aunque otras fuentes hablan de hasta 16 fallecidos. La Fiscalía General de Venezuela informó que hasta la fecha se han realizado 1,062 detenciones relacionadas con las protestas. El fiscal general, Tarek William Saab, destacó que entre los detenidos se encuentran miembros de grupos que calificó como «paramilitares» y «grupos criminales», y advirtió que quienes resulten responsables enfrentarán largas penas de prisión.
Perspectivas y próximos asos:
La falta de consenso en la OEA y la creciente presión internacional plantean un desafío para el gobierno de Maduro, que enfrenta acusaciones de fraude electoral y represión de la oposición. La comunidad internacional, incluida la ONU y la Unión Europea, continúa exigiendo transparencia y respeto a los derechos democráticos en Venezuela. La situación sigue siendo tensa, con la oposición y la comunidad internacional observando de cerca las acciones del gobierno venezolano y sus próximos pasos.