Seis menores enfrentan cargos de terrorismo tras protestas electorales en Venezuela

Un grupo de seis adolescentes, detenidos en el contexto de las manifestaciones contra la reelección de Nicolás Maduro en Venezuela, enfrentará un juicio sin las garantías procesales básicas, según denunciaron diversas ONG y figuras de la oposición. Los jóvenes fueron aprehendidos durante las protestas del 28 de julio y presentados ante una corte en Carabobo este miércoles, acusados de terrorismo e incitación al odio.

María Corina Machado, líder de la oposición y exdiputada, expresó su consternación a través de la plataforma X, destacando que estos adolescentes solamente ejercieron su derecho a la libre expresión. “Estos jóvenes representan nuestra esperanza y razón para seguir luchando”, afirmó Machado, haciendo un llamado a la sociedad venezolana a reaccionar frente a estos actos de injusticia.

Por su parte, la organización Justicia, Encuentro y Perdón (JEP), que representa legalmente a seis de los detenidos, denunció que los jóvenes fueron coaccionados para admitir los hechos durante la audiencia preliminar. Martha Tineo, coordinadora general de JEP, declaró que los adolescentes se mantuvieron firmes en su inocencia a pesar de las presiones. “Es un atropello a los derechos humanos más elementales”, comentó Tineo a la prensa.

La situación de estos adolescentes ha provocado una oleada de críticas por parte de activistas y organizaciones de derechos humanos. La ONG local, Foro Penal, informó que actualmente hay 1.905 detenidos en Venezuela considerados presos políticos, incluyendo 67 adolescentes. “La detención de estos jóvenes es una muestra más del deterioro de la justicia en Venezuela”, indicó un portavoz de Foro Penal.

El jueves, familiares y amigos de los detenidos realizaron una protesta frente al Tribunal Supremo de Justicia, exigiendo una revisión de las medidas cautelares y respeto al debido proceso. También presentaron un recurso de amparo en busca de aliviar la situación de los jóvenes, cuyas vidas han sido abruptamente interrumpidas, impidiéndoles continuar con sus estudios y actividades diarias.

El caso de estos adolescentes ha resonado no solo en Venezuela, sino también en la comunidad internacional, donde diversos actores han llamado a la liberación inmediata y a un proceso justo que respete los derechos fundamentales de los acusados.