REDACCIÓN | Panamá en Directo
Panamá | enero 7, 2025En una conferencia de prensa realizada el martes en su residencia de Mar-a-Lago, Florida, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró su postura de recuperar el control del Canal de Panamá. Durante su intervención, Trump acusó al gobierno panameño de permitir una supuesta influencia excesiva de China sobre la operación de esta infraestructura estratégica, calificándola como un «gran error» que compromete los intereses estadounidenses.
Trump declaró que “China básicamente está tomando el control del Canal”, en alusión a lo que considera una relación desequilibrada en el manejo y uso de la vía interoceánica. Además, criticó los tratados firmados por el expresidente Jimmy Carter en la década de 1970 que permitieron la transferencia del canal a Panamá, proceso completado en 1999. “El Canal de Panamá fue construido para nuestro ejército. Se lo dimos a Panamá, no a China, y ellos han abusado de ese regalo. Nunca debió tomarse esa decisión”, enfatizó.
La discusión no se limitó a una revisión histórica. Trump también abordó los costos actuales para el tránsito de embarcaciones estadounidenses, sugiriendo que las tarifas impuestas a los barcos de su país son desproporcionadas en comparación con las aplicadas a otras naciones. “Se ríen de nosotros porque creen que somos estúpidos. Pero eso está por cambiar”, advirtió.
Consultado sobre las medidas que podría tomar su administración al respecto, el presidente electo dejó abierta la posibilidad de utilizar herramientas económicas o incluso militares para renegociar los términos. «No puedo descartar ninguna opción», afirmó, dejando entrever su disposición a presionar al gobierno panameño.
Las reacciones desde Panamá no se hicieron esperar. Autoridades locales reafirmaron que el Canal es y seguirá siendo panameño. «El Canal de Panamá pertenece al pueblo de Panamá. No hay espacio para renegociaciones o imposiciones extranjeras», declaró recientemente José Raúl Mulino, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores.
La controversia también ocurre en un contexto en el que Trump ha mostrado una posición firme frente a otras regiones estratégicas, como Groenlandia, planteando dudas sobre el alcance de sus intenciones geopolíticas. El presidente electo asumirá el cargo el próximo 20 de enero, y muchos analistas ya anticipan que sus acciones podrían generar tensiones diplomáticas tanto con Panamá como con otros aliados internacionales.