El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, anunció que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha aceptado la propuesta estadounidense que busca un alto el fuego en Gaza, así como la liberación de rehenes en manos de Hamás. Blinken hizo esta declaración tras reunirse este lunes con Netanyahu y otros altos funcionarios israelíes, en el marco de un esfuerzo diplomático intensificado para poner fin a la violencia que ha sacudido la región desde octubre.

La propuesta de tregua, que cuenta con el respaldo de Estados Unidos, Egipto y Catar, contempla un plan en tres fases que pretende reducir las tensiones y asegurar la liberación de los rehenes. Durante su visita a Israel, Blinken sostuvo una reunión de tres horas con Netanyahu, el ministro de Defensa Yoav Gallant y el presidente israelí Isaac Herzog, en la que se discutieron los detalles del plan.

«El primer ministro Netanyahu me confirmó hoy que Israel apoya plenamente esta propuesta», declaró Blinken. «Ahora es el turno de Hamás para hacer lo mismo», agregó, subrayando que la implementación del acuerdo es la vía más rápida y efectiva para aliviar el sufrimiento de los palestinos tras el ataque del 7 de octubre y la subsiguiente guerra.

El conflicto, que se desencadenó tras un ataque masivo de Hamás en el sur de Israel, ha dejado un saldo devastador en ambos lados. Según cifras oficiales, Hamás mató a más de 1.198 personas en su incursión, secuestrando a 251, de los cuales 111 aún permanecen cautivos en Gaza. En respuesta, la ofensiva israelí ha causado la muerte de al menos 40,139 personas en la Franja de Gaza, según el Ministerio de Salud del territorio.

Blinken también aprovechó su visita para abordar el tema de la violencia perpetrada por colonos israelíes contra palestinos en Cisjordania ocupada. Después de que un palestino fuera asesinado en un ataque de colonos judíos la semana pasada, Blinken instó a las autoridades israelíes a tomar medidas para frenar estas agresiones y garantizar que los responsables rindan cuentas.

Mientras tanto, la comunidad internacional sigue preocupada por la posible expansión del conflicto a nivel regional, especialmente debido a las amenazas de Irán y Hezbolá de intervenir en represalia por la muerte de líderes de Hamás y Hezbolá, supuestamente a manos de Israel.