Ofensiva israelí en Gaza recrudece: tanques avanzan y crece la condena internacional

l Ejército israelí anunció este viernes la destrucción de bases de lanzamiento y escondites del grupo terrorista Hamas en la Franja de Gaza, en el marco de una nueva fase ofensiva aprobada por el Gabinete de Seguridad del primer ministro Benjamin Netanyahu.

La ofensiva contempla la toma del principal centro urbano del enclave, con el objetivo —según la Oficina del Primer Ministro— de lograr la derrota total de Hamas, garantizar el retorno de los rehenes y establecer una administración civil alternativa, sin participación del grupo islamista ni de la Autoridad Palestina.

“Eso no es posible con Hamas”, declaró Netanyahu en una entrevista con Fox News, donde insistió en que Israel no busca una ocupación permanente, sino establecer un perímetro de seguridad y delegar la administración a fuerzas árabes “que no representen una amenaza”.

La aprobación del plan se impuso pese a objeciones internas, como la del jefe del Estado Mayor, Eyal Zamir, quien según medios israelíes advirtió sobre los riesgos para los rehenes y la población civil en caso de una ocupación total.

Situación crítica en Gaza

En paralelo, la situación humanitaria en Gaza continúa deteriorándose. La Organización Mundial de la Salud (OMS) reportó al menos 99 muertes por malnutrición en lo que va del año, aunque se estima que la cifra real es mucho mayor. La ONU calcula que se necesitan 600 camiones diarios para cubrir las necesidades básicas de los 2,2 millones de habitantes del enclave, pero actualmente ingresan apenas entre 70 y 80 camiones con restricciones.

Reacciones internacionales

La decisión israelí generó reacciones inmediatas. El gobierno de Países Bajos canceló tres licencias de exportación naval a Israel, alegando “riesgo de uso final no deseado” en Gaza. El ministro de Exteriores, Caspar Veldkamp, calificó la medida de “excepcional” ante el empeoramiento de la crisis.

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, condenó firmemente la medida israelí, afirmando que sólo provocará “más destrucción y sufrimiento”. Reiteró su llamado a un alto el fuego permanente y a una solución basada en la creación de dos Estados.

Desde Ramala, la Autoridad Palestina calificó la decisión israelí como “peligrosa” y una “flagrante violación del derecho internacional humanitario”. El gabinete de Mahmoud Abbas advirtió que la ocupación de Gaza conducirá a una “catástrofe humanitaria sin precedentes”.