Perú impondrá visa a mexicanos en respuesta a medida de México

Perú impondrá visa a mexicanos en respuesta a medida de México

La tensión diplomática entre Perú y México ha escalado luego de que ambos países decidieran imponer visados para sus ciudadanos en respuesta a una medida similar tomada por el otro. Este cambio significativo en las políticas de viaje ha desatado preocupación en el sector turístico peruano y ha generado incertidumbre sobre el futuro de las relaciones bilaterales.

La medida tomada por Perú se fundamenta en el principio de reciprocidad, según anunció la Cancillería local. Esto significa que a partir del próximo 20 de abril de 2024, los ciudadanos mexicanos que deseen visitar Perú deberán obtener una visa previa. Esta decisión se produce como respuesta a la medida unilateral adoptada por México, que también exigirá visa a los peruanos a partir de la misma fecha.

En un comunicado oficial, la Cancillería peruana lamentó la decisión de México, argumentando que esta medida afecta los esfuerzos por mejorar las relaciones bilaterales y contradice los compromisos asumidos en la Alianza del Pacífico para facilitar el libre movimiento de personas entre ambos países.

La excepción a esta nueva regulación será para los ciudadanos mexicanos que cuenten con visas de países como Schengen, Reino Unido, Canadá, Estados Unidos, Australia y Japón, así como para aquellos con residencia permanente en estos países y en los miembros de la Alianza del Pacífico.

El anuncio de esta medida ha generado preocupación en el sector turístico peruano. La Asociación Peruana de Operadores de Turismo Receptivo e Interno (Apotur) expresó su desacuerdo y solicitó al Gobierno peruano reconsiderar la decisión, argumentando que podría tener un impacto económico significativo. Según datos proporcionados por la asociación, México se ha convertido en el cuarto país no fronterizo con mayor cantidad de turistas que visitan Perú, lo que evidencia la importancia del flujo turístico entre ambos países.

La tensión diplomática entre Perú y México, que se remonta a los enfrentamientos políticos ocurridos en años anteriores, ahora ha alcanzado un nuevo nivel con estas medidas restrictivas de viaje. El futuro de las relaciones bilaterales y el impacto en el sector turístico siguen siendo inciertos, mientras ambos países buscan proteger sus intereses nacionales.