Pete Rose, el rey de los hits del béisbol, fallece a los 83 años

Pete Rose, el legendario jugador de béisbol que dejó una huella imborrable en la historia del deporte por su inquebrantable pasión en el campo y su escandalosa salida de las Grandes Ligas, ha fallecido a los 83 años. Stephanie Wheatley, portavoz del condado de Clark, Nevada, confirmó su deceso el lunes, aunque las causas aún no han sido establecidas.

Rose es recordado como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, con una carrera plagada de éxitos. Fue un símbolo de los Cincinnati Reds, el equipo con el que ganó tres títulos de la Serie Mundial, destacando especialmente en las temporadas de 1975 y 1976. Además de ser un 17 veces All-Star, Rose acumuló cifras récord: jugó 3,562 partidos y tuvo 15,890 apariciones en el plato, marcas que permanecen imbatidas. Su logro más sobresaliente fue romper el récord de Ty Cobb, alcanzando un total de 4,256 hits, una hazaña que, hasta hoy, ningún jugador ha podido superar.

El apodo «Charlie Hustle» que Rose se ganó en su juventud reflejaba su enfoque agresivo y constante en el juego. Era conocido por su estilo intransigente: siempre corría hacia la primera base con toda su fuerza, incluso después de recibir una base por bolas. A lo largo de 24 temporadas, jugó como segunda base, jardinero, tercera y primera base, mostrando una increíble versatilidad en el campo. Su consistencia como bateador fue su principal virtud: Rose logró superar los 200 hits en 10 temporadas, mientras que en otras cuatro alcanzó más de 180 hits.

Sin embargo, su trayectoria gloriosa fue ensombrecida por el escándalo de las apuestas. En 1989, Rose fue acusado de apostar en partidos de béisbol, incluidos algunos en los que dirigía a los Reds. A pesar de sus vehementes negaciones iniciales, una investigación concluyó que Rose había participado activamente en apuestas durante varias temporadas, lo que llevó a su expulsión de por vida del deporte. Esta sanción no solo destruyó sus aspiraciones de ingresar al Salón de la Fama, sino que también lo convirtió en una de las figuras más polémicas de la historia del béisbol.

La exclusión del Salón de la Fama no impidió que Rose continuara ligado al deporte de alguna forma. En 2016, fue incluido en el Salón de la Fama de los Cincinnati Reds, y en 2017 se desveló una estatua suya en el Great American Ball Park, que lo inmortalizó en la memoria de los fanáticos de su ciudad natal. Aunque su legado siempre estará marcado por la controversia, Rose será recordado como uno de los jugadores más influyentes y dominantes en la historia de las Grandes Ligas.